Terapia Rolling. Automasaje

La gran mayoría de nuestros días los pasamos sentados o acostados. Conducimos viajes más largos, trabajamos más horas sentados en un escritorio y, durante nuestro tiempo libre, generalmente nos dejamos caer en el sofá viendo la televisión o mirando algún otro tipo de dispositivo electrónico (teléfono inteligente, tableta, etc.).

 Claro, podemos levantarnos y movernos durante una o dos horas durante el día con nuestros entrenamientos, pero en general, pasamos nuestras vidas sentados encorvados.

 Esta mala postura puede llevar a una serie de problemas, uno de los cuales se parece a Quasimodo en su camino para tocar el campanario.

 La mala postura ejerce más presión sobre la columna vertebral, los músculos y las articulaciones, lo que provoca todo tipo de dolores y molestias.

 Tener una mala postura también puede conducir a una desalineación de la columna vertebral y las articulaciones, lo que ejerce más presión sobre ellas, lo que induce grandes cantidades de desgaste y, en última instancia, conduce a la artritis. Es posible que haya visto esto (o lo haya experimentado usted mismo) con la cabeza inclinada hacia adelante.

 Idealmente, las orejas deben estar alineadas con los hombros cuando se ve a alguien desde un lado.

La mala postura también puede conducir a un flujo sanguíneo y circulación deficientes en todo el cuerpo, lo que puede conducir al desarrollo de venas varicosas. Además, dado que el flujo sanguíneo puede verse afectado, la recuperación muscular de los entrenamientos puede verse afectada negativamente, ya que es la sangre la que transporta los nutrientes (aminoácidos esenciales, glucosa, etc.) a nuestros músculos que les permite reparar, recuperarse y crecer.

 Como mencionamos anteriormente, la mala postura ejerce un estrés indebido en las áreas del cuerpo que no deben soportar ese tipo de carga durante períodos prolongados de tiempo. Sin embargo, cuando crónicamente tiene una mala postura, estas estructuras están sujetas a cargas durante largos períodos de tiempo, lo que puede llevarlo a sentirse fatigado y letárgico, ¡sin mencionar el dolor!

Existen investigaciones que señalan, una asociación entre la mala postura y el mal humor. Sin embargo, cuando los investigadores instruyeron a los participantes para que adoptaran una postura erguida, las personas informaron que mejoraron el estado de ánimo, redujeron la fatiga y disminuyeron el enfoque propio.

 Básicamente, si se siente deprimido, caminar alto, sentarse erguido y estar orgulloso puede mejorar su estado de ánimo y confianza en sí mismo.

 Cuando te sientas con una mala postura, estás comprimiendo los pulmones, el diafragma y todos los demás órganos de tu cuerpo. Como tal, puede experimentar dificultad para respirar, lo que puede conducir a bajos niveles de energía y sensación de fatiga. Recuerde, el oxígeno está involucrado en la producción de energía, así como en el crecimiento y reparación de las células. ¡También es importante para la salud y la función del cerebro!

 La mala postura generalmente ejerce tensión en el cuello, lo que crea tensión y eventualmente conduce a dolores de cabeza. Puede provocar opresión y acortamiento de los músculos lumbares, que son un factor clave para el dolor lumbar.

 Uno de los mayores problemas de una mala postura es la cabeza inclinada hacia adelante. Para combatir esto, debemos trabajar para fortalecer nuestros cuellos en la dirección opuesta.